Es un desorden neurológico crónico del sueño que afecta al sistema nervioso central. Se caracteriza por tener un sueño excesivo y abrumador durante el día, incluso después de haber dormido muy bien durante la noche, somnolencia, la que puede persistir durate largo tiempo.
El sueño nocturno puede llegar a ser fragmentado al despertarse con frecuencia y los ataques de sueño se presentan con o sin aviso durante el día una y otra vez. Cada persona puede presentarlo de diversas maneras, somnolencia en el día, cataplejía, pérdida del control de los músculos, parálisis del sueño, incapacidad para hablar o moverse al quedarse dormido o al despertar, alucinaciones, depresión, dificultad para concentrarse y recordar.
Podemos solucionar este grave problema mediante siestas terapéuticas, dos o tres horas de siesta cortas en el día podrá controlar la somnolencia y ayudar a mantenerse despierto, una buena alimentación, el ejercicio regular.
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